Cuándo no somos capacesde madurar y hacer realidad el amor en nuestras vidas, como castigo y reacción a nuestra falta de dignidad y respeto, acabamos volviéndonos en contra de nosotros mismos: Nos autodestruimos .

Nos distanciamos emocionalmente de los demás y nos aislamos.

Nos separamos para que no se metan en nuestros asuntos porque no queremos que la conciencia nos haga pensar y nos ponga de frente con nuestra responsabilidad.

Este distanciamiento emocional se va transformando poco a poco en aburrimiento y soledad.

Y cuando nos dejamos llevar por esta soledad egotica, olvidamos nuestra esencia y nuestra grandeza.